Pero igualmente se partió de la idea que la sociedad de la información aumenta la dependencia de los países menos desarrollados a la tecnología que generan los países desarrollados; y consecuentemente, en muchas de las reuniones preparatorias para el Proyecto de Declaración y Plan de Acción de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información se debatió sobre los problemas de convergencia digital que hay que superar y que preocupan al sector de las telecomunicaciones, y cuya resolución van de la banda ancha a la movilidad, pasando por la aplicación de nuevos modelos comerciales y la búsqueda de nuevas fuentes de ingresos. En otras ocasiones también se discutió apasionadamente sobre la forma más eficaz de encauzar a las nuevas tecnologías para llevar conectividad a más de un millón de aldeas en todo el mundo, que aún no han accedido a la sociedad de la información. Los participantes de los países en desarrollo expresaron cierta preocupación por el hecho de que sus esfuerzos para colmar la brecha digital se viesen obstaculizados si los avances tecnológicos fueran demasiado rápidos y no pudieran seguir el ritmo de la innovación.

Construir una nueva sociedad como la sociedad de la información, donde la brecha digital se transformará en oportunidades digitales basadas en el intercambio de conocimientos. Por este motivo, la creación de un marco adecuado será esencial, y donde la convergencia digital de los medios de información y comunicación, deberá desempeñar una función humanizadora, y sobre todo impulsar sociedades más democráticas y equitativas en todo el mundo; por ello, habrá que educar y crear la confianza y la seguridad en la sociedad de la información, en tanto que elementos esenciales para su pleno funcionamiento, y los cuales se deberán ofrecer a los usuarios de los medios de comunicación y de las redes de comunicación e información como garantías necesarias contra el ciberdelito y la pornografía infantil, así como la protección de la vida privada y la confidencialidad.

Se debe considerar que el nacimiento de una Sociedad de la Información y del Conocimiento tiene que incidir en cada ciudadano; por tanto, es necesario que los gobiernos, las organizaciones internacionales y no gubernamentales de la sociedad civil, las empresas y organismos del sector privado, incorporen todos aquellos trabajos que sean lo suficientemente amplios para que puedan participar todas las partes interesadas. Las contribuciones son el punto de partida de una nueva era, en la que la sociedad de la información pasará a ser una sociedad de intercambio de conocimientos y el respeto de los valores éticos dará lugar a una mayor comunicación entre los hombres y a la solidaridad mundial.

De ahí que, no hay que limitarse a la pura tecnología, sino examinar de cerca de qué manera se utilizan y se norman las TICs; en particular facilitando su funcionamiento para que exista un aprovechamiento pacífico de ellas y, que además permitan fomentar el desarrollo social de las poblaciones. Se trata de definir y superar aquellas dificultades que afronta la construcción de una sociedad de la información y comunicación, desde una perspectiva humana.

Actualmente, la función de los gobiernos, del sector empresarial o de la sociedad civil en la promoción y utilización de las TICs para el desarrollo de la educación y capacitación, la seguridad o cuidado del entorno humano, por ejemplo, es la de fomentar - dentro de las tareas de identidad cultural y diversidad lingüística, contenido local y desarrollo comunicativo -, las aplicaciones de las TICs orientadas a la elaboración y desarrollo de ciberestrategias nacionales para todos los países, en un plazo de tres años, incluida la construcción necesaria de capacidades humanas para todos, como el gobierno electrónico, la empresa electrónica, el ciberaprendizaje o la cibersalud.

Establecer un Acuerdo Digital Mundial como nueva plataforma para la asociación e interacción entre partes interesadas gubernamentales y no gubernamentales, basado en la división del trabajo y en responsabilidades especializadas, así como en los intereses comunes y específicos identificados, es otra tarea que se acompaña con una compilación progresiva de un índice del desarrollo de las TICs y un informe sobre el desarrollo en general de las TICs, cuya clasificación de los países irá acompañada de un trabajo analítico sobre políticas y su aplicación.