3.7. PROBLEMAS PARA EL ACCESO O APRENDIZAJE A LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS

A partir de los años ochenta comienza el desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), configurando la estructura de la denominada "sociedad de la información" actual. Bajo el rótulo de tecnologías de la información se incluyen el conjunto de tecnologías de la microelectrónica, la informática (máquinas y software), las telecomunicaciones, la televisión, la radio, etc.

Frente a las pasadas revoluciones económicas y sociales que han sido muy lentas y sólo han afectado a determinadas áreas del mundo, la actual es rápida y afecta, potencialmente, a todo el Planeta, pudiendo hablar de globalización o mundialización de la economía en tiempo real.

Las nuevas tecnologías están provocando un cambio socioeconómico que afecta al mundo en su conjunto, contribuyendo a crear una nueva fuente de desigualdades. En la sociedad española un 30% de la población usa el ordenador y que sólo en torno a uno de cada diez españoles tiene acceso a Internet y ha hecho uso de esta posibilidad.

Tabla 4. Evolución del uso y acceso a Internet. % de la Población de 14 y más años.

Año Usan Ordenador Tienen acceso a Internet
1196
20,6%
2,4%
1997
22,0%
4,3%
1998
25,7%
7,1%
1999
27,4%
10,5%
2000
29,3%
13,4%

Fuente: Informe España 2001. Fundación Encuentro, pág. 433 (A partir de datos de AIMC)

Existen pocas investigaciones sobre los rasgos principales de aquella parte de la población más vulnerable a sufrir los procesos de exclusión social por el impacto de las nuevas tecnologías, pero sí se dispone del perfil sociodemográfico de los usuarios de Internet en nuestro país.
Los internautas son:

  • Hombres en su mayoría (68%).
  • Menores de 44 años (86%).
  • Con un perfil urbano. Residen en localidades de más de 200.000 habitantes (50%).
  • El (44%) se concentran en las Comunidades Autónomas de Madrid y Cataluña,
  • Con educación secundaria o universitaria (92%).
  • Y con conocimientos de inglés (67%).

En definitiva, son las mujeres, los mayores de 45 años, tienen bajos estudios, los que carecen de conocimientos de idiomas, inmigrantes y quienes viven en zonas rurales son los que más probabilidades tienen de ubicarse en la posición más desfavorable de la brecha digital, en términos de desigualdad social creada por las nuevas tecnologías.

Este perfil también afecta a los jóvenes y a las personas con edad avanzada, aunque también afecta a los jóvenes que carecen de una formación educativa mínima y a inmigrantes de distinta procedencia (África subsahariana, el Magreb, Europa del Este, Sudamérica, etc.) con formación previa diversa (titulación universitaria, trabajadores cualificados, analfabetos, etc.). Por ello, el impacto de las nuevas tecnologías debe considerarse en el ámbito educativo y más concretamente en la educación de las personas adultas inmigrantes, para la mejora de las experiencia de enseñanza-aprendizaje de la enseñanza de la lengua, la educación vial, la obtención del título de Graduado en Secundaria o el Acceso a la Universidad para mayores de veinticinco años.

 
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